¿QUÉ ES EL LOTE 108?
Muchos datos publicados últimamente
nos hacen ver que el lote 108 tiene un gran potencial de hidrocarburos. El lote
se encuentra en el corazón del VRAE, la principal región de producción de hoja
coca en el Perú. En este lugar el plan de cultivos alternativos de DEVIDA,
organización bajo tutela estadounidense ha sido un rotundo fracaso pues la
única respuesta que ha dado el gobierno de Ollanta Humala ha sido la represión
contra los campesinos cocaleros y el bombardeo indiscriminado de poblaciones,
es decir, han dado una respuesta militar a un problema social, agrario. El VRAE
es una región que si tuviera un verdadero plan de desarrollo agrario para
apoyar al campesinado aseguraría un futuro para este hermos valle pero parece
ser que el interés es la explotación de hidrocarburos del subsuelo y no el
bienestar de los habitantes peruanos que viven allí.
“En el año 2005 el
gobierno peruano mediante Decreto Supremo N° 036-2005-EM, otorgó la
licencia de exploración y explotación de hidrocarburos en el LOTE 108 a la
filial argentina de la transnacional PLUSPETROL Resources Corporation con sede
central en Holanda. Actualmente en el LOTE 108 la PLUSPETROL tiene un 85% de
participación y la australiana WOODSIDE PETROLEUM 15%”.
El lote 108 tiene un
área de 1’241,675 hectáreas y se ubica en la cuenca del río Ene. Es una extensa
región que comprende los departamentos de Junín (Chanchamayo y Satipo), Cusco
(La Convención), Ayacucho (Huanta y La Mar), Pasco (Oxapampa) y Ucayali
(Atalaya).
El lote 108 está
dividido en 2 zonas: la parte norte que es donde se han estado realizando las
exploraciones que han generado diversas protestas como la de Pichanaki y la
parte sur que comprende la zona de influencia del Partido Comunista del Perú
Militarizado dirigido por el camarada José y en donde PLUSPETROL parece que
tiene serias dificultades para ingresar según los representantes de la
transnacional.
En el corazón del
lote 108 y del VRAE el Comando Sur de los Estado Unidos ha proyectado construir un “aeródromo militar”
pero en realidad todo deja a pensar que se trata no de un aeródromo militar
sino de una base militar estadounidense en la región. Se pretende expropiar
para ello 475 hectáreas a los habitantes del poblado de Otari.
Hace unos días se
aprobó el ingreso de 3,329 militares estaounidenses en el Perú. ¿Para qué?
¿La “base militar”
tendrá dentro de sus objetivos proteger los intereses de PLUSPETROL?
¿Qué piensan los
pobladores?
“Los gringos
quieren venir a apoderarse de nuestras riquezas eso no nos conviene. Dicen que
van a construir un aeródromo militar aquí, osea toda esta naturaleza, el lugar
dónde hemos luchado, donde vivimos, lo van a convertir en polvo. Los gringos no
sólo vienen a erradicar la coca, vienen a apoderarse de nuestras
riquezas. Vendrán gringos armados, eso no nos conviene”.
En Quinquiviri Baja,
a poca distancia de Otari, pudimos conversar con el dirigente asháninka
Herminio Castañeda opuesto también a la construcción del “aeródromo militar”:
“Militarización
significa violación, habrá violencia, vendrán estadounidenses, ¿Acaso ellos
conocen a las señoras nativas? Van a ir violando por ahí. Eso no queremos
nosotros. Ellos son malos. Acá no queremos violadores. Que se vayan a luchar
contra los tíos que están en Vizcatán, que vayan allá, que hagan su aeropuerto
por allá, no acá. Nosotros hemos hecho la pacificación, ahora quieren venir los
estadounidenses a aprovecharse de nosotros los ashaninkas. Que luchen como yo
he luchado contra los tíos allá en Vizcatán”.
“La
construcción del “aeródromo militar” estará a cargo de BUILDING STRONG, que no
es otro sino el Cuerpo de Ingenieros de las Fuerzas Armadas de los Estados
Unidos (USACE) que, como lo señalan en su página web “tiene como objetivo
proteger los intereses de los Estados Unidos en el extranjero a través de su
experiencia en ingeniería”.
“Los asháninkas tenemos nuestra farmacia que son los
bosques, allí obtenemos nuestras medicinas, nuestro mercado son los ríos, ¿qué
haremos si nos lo quitan?” finaliza diciendo con cierta amargura Herminio.
Lucha antisubversiva, represión indiscriminada de la
población, expropiación de territorios asháninkas, exploración, explotación del
lote 108 y base militar
estadounidense. El gobierno de Olanta Humala sigue paso a paso la “hoja de ruta
Vargas Llosa”, de un gobierno dictatorial, aplicando el continuismo de un
politica económica en contra de los intereses del puebo peruano para
administrar recursos naturales del Perú al servicio de transnacionales y
potencias extranjeras.
A pesar de
todo ello la ola de solidaridad en todo el Perú sobretodo de la juventud que perdió el miedo, es una muestra
de la conciencia de la nuevas generaciones para un proyecto nuevo de país,
solidario, unido, independiente, sin yugo. ¡Juntemos nuestras voluntades
herman@s!.
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